Conoce a LELO
La marca que hoy conocemos como LELO nació en 2003 en el salón de un apartamento en Estocolmo, donde tres diseñadores coincidieron con la idea adecuada. Y esa idea, que con el tiempo fue la que restauró y expandió los límites de toda una industria, se forjó con una sencilla y brillante pregunta:
¿Y si nuestros juguetes más íntimos fueran tan bonitos como aquellos que mostramos con orgullo?
Luego de ese big bang, ya en la segunda década de producción de los más refinados, lujosos e icónicos objetos de placer, LELO ha consolidado una tradición de diseños basados en la calidad, sorprendentes innovaciones y un universo de placer distinto a cualquier otro.
EL RESPLANDOR DE UNA NUEVA GALAXIA
Somos una marca con numerosos matices, y lo que realmente hacemos va mucho más allá de lo que físicamente creamos. La insaciable curiosidad de LELO reproduce el concepto de la luz, donde el deseo de explorar y refinar el espacio se concentra en las sensaciones humanas y la tecnología digital, como una entidad similar y distinta, al mismo tiempo. Energía y materia que nos hacen únicos, distintos, excepcionalmente diferentes.
Nuestra particularidad se basa en el diseño de nuestros productos. Las formas son singulares e instantáneamente reconocibles, sin necesidad de lente telescópica, como un código que se mantiene en constante evolución; pues los principios holográficos que informan nuestros diseños ensanchan sus fronteras, al tiempo que la ciencia nos permite nuevas técnicas de producción. Así, podemos ofrecer nuevas sensaciones que nuestros clientes ni siquiera saben que desean. Y eso solo lo podemos hacer porque vemos más allá de nuestras narices, más allá de los productos que ya hemos fabricado, más allá de la industria en la que nos ubican… Observamos más allá de las fantasías.
LIBERAR DESEOS
Lo que hacemos es observar donde nadie más lo hace, espacios inexplorados y oportunidades de crear nuevos escenarios de sensualidad. Energía que encontramos en el instante en que descubrimos cómo generar esos momentos eróticos, y que se convierte en armonía cuando nuestro equipo estelar trabaja todas las disciplinas del producto final.
Venimos de la luz de aquella pequeña galaxia en el salón de un apartamento en Estocolmo. Hoy, LELO es una constelación de oficinas que se expande desde Shanghái a San José, aunque nuestra carta de naturaleza sigue leyendo nacionalidad sueca. Y es que aquella luz nunca se apagará, porque es la que ha iluminado nuestros objetos estrella.
TÚ ERES EL CENTRO DE NUESTRO UNIVERSO.
El reconocimiento que han tenido estos productos es el resultado de la innovación, y está, a su vez, es consecuencia de nuestro compromiso con los millones de personas que aprecian esa satisfacción que solo se experimenta cuando se compra un objeto de placer LELO. Porque, independientemente del orgullo que sentimos cuando nos otorgan premios, en el fondo, sabemos que estos son consecuencia de millones de placeres individuales, de todos y cada uno de sus gozos; hacemos todo lo que está en nuestras manos para convertir tus deseos en realidad, porque tú eres el centro del universo LELO.
Seguimos expandiendo nuestro universo y nuestra nueva parada ha sido aquí en la República Dominicana.
Continuamos investigando y desarrollando nuevas y deliciosas ideas. Es un brillante futuro, y nos encantaría que quisieras participar en este viaje.
